El Pastor Blanco Suizo es un perro elegante, fiel compañero de la familia, de fuerte constitución y un gran perro de trabajo.
De apariencia lobuna y denso pelaje blanco,  es uno de los perros más hermosos que existen. Tanto morfológicamente como filogenéticamente es en esencia un pastor alemán de pelo blanco.
A lo largo de su historia la raza ha recibido diferentes nombres entre los que se encuentran: pastor alemán blanco, pastor blanco americano, pastor blanco; hasta que finalmente se acabó llamando Pastor Blanco Suizo porque la Sociedad Canina Suiza fue la primera en reconocer esta raza como independiente.

 

En general, los pastores blancos suizos son perros inteligentes y leales. Su temperamento puede ser algo nervioso o tímido, pero cuando están bien educados y socializados se adaptan con facilidad a diferentes situaciones, por lo que pueden vivir en diferentes lugares y bajo diferentes condiciones. Es equilibrado y constante por naturaleza.
Al ser perros relativamente tranquilos, los pastores blancos suizos no son muy propensos a desarrollar problemas de comportamiento cuando han sido socializados correctamente. Sin embargo, es importante brindarles suficiente ejercicio y compañía para que no se aburran ni desarrollen ansiedad.

 

  • Origen: Europa, Suiza
  • Clasificación FCI: Grupo I
  • Características Físicas: Musculoso y Proporcionado
  • Tamaño: Grande
  • Ideal para: Pisos, casas, senderismo, pastoreo, deportes

 

 

Perros albinos vs. perros blancos

Si bien los perros albinos pueden tener pelaje blanco, no todos los perros blancos son albinos, y no hay que confundir entre ambos.
Los perros albinos no tienen pigmentación normal, por lo que su piel suele ser rosa pálida y sus ojos son muy claros y pálidos.
Los perros blancos que no son albinos, tienen ojos y piel de colores más oscuros, y no suelen tener los problemas de salud de los perros albinos.
Esa idea equivocada dio lugar a que se edite el estándar del pastor alemán, excluyendo a los perros blancos. En consecuencia, los perros blancos dejaron de usarse como reproductores y se eliminaba a los cachorros de ese color. Pasada la Segunda Guerra Mundial, el pastor alemán blanco era considerado una aberración en Alemania, pero seguía siendo criado en Estados Unidos y Canadá sin presentarse mayores problemas de salud en la raza ni perros «degenerados».